†▲Wh0re Int0xication▲✞!

jueves, 7 de julio de 2011

Suelen llamarme soñadora.

Una mañana te despiertas, con ganas de comerte el mundo, con la necesidad de tenerle entre tus brazos, besarle, dejarle sin saliva, pero conforme te levantas y pones lo dos pies en el suelo, te das cuenta, de que no va a ser así. Él esta lejos, a cientos de kilómetros, ni si quiera puedes llamarle, porqué no tienes saldo, o quizá porqué al llamarle no lo coge. Empiezas a desconfiar, pero no puedes, es tu pareja, le quieres, ¿no? Sigue pasando el día, no para de llover, odias la lluvia, en cambio, cuando el te dice: ‘’Va a llover’’, te encanta, por qué significa que te ama. Desayunas, ves en la nevera chocolate’’Umm, a él le encanta’’, te tomas un trozo con un vaso de leche. Vas a clase, toca Matemáticas, en tu cabeza está él. Empiezas a formularte problemas en tu cabeza sobre él y tú. Lengua, poesía, poemas de amor a distancia, oh genial. Recreo, estas con tus amigos, pero solo se te pasa él por la cabeza, estás ida. Así todo el día escolar. Llegas a casa, te quitas la ropa, y ves en tu mano o brazo escrito su nombre con un corazón al lado. Comes, una sopa de letras. Vas buscando sus vocales y consonantes y las pones en la esquina del plato. Formas su nombre, aparece tu madre, y las quitas rápido. Terminas de comer, vas a tu habitación, tienes que estudiar, pero coges el ordenador, te conectas. No está. Te desconectas. Abres el libro, coges el móvil, le das un toque. No te lo responde. Enciendes el ordenador, te conectas, está. Ese es tu feliz momento del día, habláis un rato, se va, a estudiar, tu también debes. Apagas. Te pones frente al libro, aparece él continuamente por tu mente, en lo que te ha contado. Llega la hora de cenar, te vuelves a conectar, le ves, decides llamarle, te lo coge, os tiráis toda la noche hablando, acabas rendida, le cuelgas con un ‘’te quiero’’, y te duermes. Al día siguiente lo mismo, y te preguntas cada noche, cuando llegará el momento de verle.

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